Después de un mal día en la oficina en Valencia, me puse a mirar reels en Instagram y uno me llevó directamente a plinko. No esperaba nada, pero me llamó la atención el diseño del juego con fichas cayendo, tipo pachinko. Empecé con apuestas pequeñas solo por curiosidad y en una jugada la bola fue directo al multiplicador mayor. No me lo creía. Fue un subidón inesperado que mejoró mi día sin duda.
Después de un mal día en la oficina en Valencia, me puse a mirar reels en Instagram y uno me llevó directamente a plinko. No esperaba nada, pero me llamó la atención el diseño del juego con fichas cayendo, tipo pachinko. Empecé con apuestas pequeñas solo por curiosidad y en una jugada la bola fue directo al multiplicador mayor. No me lo creía. Fue un subidón inesperado que mejoró mi día sin duda.